Laberínticos paisajes de un Carroll beodo
socaban mi razón desde tus ojos.
Y el espacio que ceden tus labios,
es apenas un silencio de infinitos
que pervierten mis sentidos.
La vuelta a mí se fue cubriendo de ansiedades contenidas, de imágenes de piel, de sonidos y de sensaciones.socaban mi razón desde tus ojos.
Y el espacio que ceden tus labios,
es apenas un silencio de infinitos
que pervierten mis sentidos.
La vuelta fue maravillosa